5 de octubre 2024
Basilea es una ciudad en la que bulle arte por todas partes. Es la capital cultural de Suiza, con museos de talla mundial como el Kunstmuseum Basel, la fundación Beyeler o el Tinguely Museum, además de un sinfín de actividades culturales a lo largo del año; entre otras, Art Basel, una de las ferias de arte más importantes del mundo (diría la más importante, pero voy a ser cauto). El centro histórico de Basilea ofrece también muchos atractivos y es ideal para recorrer y disfrutar a pie, o tomando algunos de sus tranvías, tan puntuales y cómodos. En Basilea, además de cultura, se respira un aire internacional, pues hace frontera, al norte, con Alemania y al oeste, con Francia. De hecho, el aeropuerto Euroairport Basel- Mulhouse – Friburgo presta servicio a los tres países. Cuando viajo allí, me gusta encontrarme en el aeropuerto con la doble salida a Francia o a Suiza. En ese momento, debo decidir o quedarme en la Unión Europea o salir de la misma. Y yo, naturalmente, salgo de la Unión Europea, a pie, para tomar un autobús que me lleva al centro de Basilea.
Es una gran satisfacción para mí exponer en esta ciudad. Estos días, además, los mercados navideños, el vino caliente (Glühwein) y el bullicio de estas fechas, crean en la ciudad una atmósfera especial. En Basilea expongo, en la Galería Katapult, junto al Rin y el centro histórico, desde hoy y hasta el 25 de enero, en una colectiva con las artistas Beatrice Schnitzer, Rossana Rossignoli y Leyla Milou. Ya te contaré qué tal ha ido. De momento te dejo algunas fotos por aquí, de la galería y una conmigo, en un mercado navideño, junto a la catedral. ¡No dejes de visitar la exposición si andas por allí.
